Llegamos a la mitad de la serie del momento. En este episodio 6 de Luis Miguel: La serie, se desvelaron algunos de los más fuertes rumores de la vida de “El Sol”: ¿su papá, Luisito Rey, fue el responsable de acercar a su hijo a las drogas y de provocarle fuertes problemas financieros? Aunque este capítulo ha sido uno de los menos emocionantes de los que hemos visto hasta ahora, tuvo algunas buenas cosas. Aquí la reseña.
Lo bueno del episodio 6 de Luis Miguel: La serie
El arco de Marcela
La serie se ha preocupado por elevar cada vez más el misterio de qué le sucedió a la mamá de Luis Miguel. Poco a poco vamos teniendo más claves y la situación con Luis Rey se va poniendo más tensa en cada capítulo que pasa. De lo más impactante y escabroso es aquella escena donde Luis Rey soborna al doctor para que drogue a su hijo para que aguante el ritmo de trabajo (la efedrina es pariente de las anfetaminas). Es importante recordar que la serie está basado en aquello que el mismo cantante reveló en diversas entrevistas. Eso, más el robo de Luis Rey a su famoso hijo lo convierten en el padre del año… not. Pero como pintan las cosas, parece ser que la desaparición de Marcela será el gran cliffhanger del final de temporada. Nos queda claro con la escena musical del capítulo: “Mamá, mamá, mamá”.
Ver las épicas fiestas en casa de Luismi
El estatus de parrandero de Luis Miguel es legendario. Y aunque lo habían explorado en otros capítulos, en éste se vio con lujo de detalle. Está muy divertido ver cómo vivían la vida las celebridades de esa época. Además, acertaron haciéndolo a través de los ojos del cadete Tello a quien Luismi le comenta: «Aquí todos son los que crees que son». ¿Quién no ha querido ir a una fiesta así?
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Lo malo del episodio 6 de Luis Miguel: La serie
La falta de música
Este capítulo sí contó con algunas canciones de “El Sol”, pero se ha ido dejando poco a poco atrás el aspecto musical para darle paso al drama. Pero al final, lo que hizo a Luis Miguel legendario fueron sus interpretaciones que lo colocaron en la mira del público. Ojalá retomen algunos de sus más grandes éxitos pronto. La realidad, es que la serie ha ido perdiendo la poca fuerza narrativa que tenía al principio. Esperemos que con los últimos capítulos la recuperen y salven la temporada.
Le duró muy poco lo de chico malo
Si de algo ha pecado este programa de televisión es de hacer ver a Luis Miguel como una inocente paloma. El capítulo pasado vimos un dejo de su lado obscuro, pero lo resolvieron muy rápido. Nadie se cree que un puberto con tanto dinero y poder no perdiera el piso. Una exploración más profunda de este aspecto del cantante hubiera sido perfecta. Además, están de moda los antihéroes. Pero, como ya mencionamos, al final esta es una interpretación por parte del mismo protagonista.
Pues así fue el episodio 6 de Luis Miguel, decepcionante y aburrido. Pero claro está que ahí estaremos pegados a la pantalla el siguiente domingo. Mientras, obvio queremos ver cómo quedó el video de La incondicional –chance encontramos al cadete Tello en él–.
