Por Emmanuel Gutiérrez
Si hay una receta que domina New Order es crear atmósferas bailables e infalibles, y lo han comprobado a lo largo de 35 años y un cambio en su alineación original con obras maestras como “Movement”, “Low Life” o “Republic” que los refrendan como pilares del post-punk, synth-pop y dance-rock.
¡Así es! El ahora quinteto originario de Manchester (se extraña a Peter Hook, quien dejó a la banda en 2007) decidió apostar en el terreno que domina con algunas colaboraciones, algunas de ellas que funcionan a la perfección (Brandon Flowers, un ejemplo) y donde se exhibe una ayuda mutualista para manufacturar acordes con altas dosis de música que invita a no quedarse estático.
Una década pasó para que New Order regresara al estudio y se inspirara para darnos material inédito (recordemos que “Lost Sirens” son las “rebabas” de “Waiting For The Sirens’ Call” del 2005); Bernard Summer, Stephen Morris, Gillian Gilbert, Phil Cunningham y Tom Chapman fueron sumamente cuidadosos en la elección del material y de aquellos que estuvieron sumergidos como un “plus” para darle un giro final a “Music Complete”.
“Restless” podría pasar como un sencillo de cualquier placa después del “Get Ready”, no es el tema que impulsará a los herederos de Joy Division a la cima de nueva cuenta, pero es una jugada que el grupo eligió para dejar al aire la esencia y gran calidad que conforman su nueva producción.
Tom Rowlands (The Chemical Brothers) fue un invitado de lujo y su intervención se nota de inmediato en “Singularity” y “Unlearn This Hatred”, temas que se enfrascan en sonidos electrónicos agresivos pero bien ejecutados. A los que apenas conocen al grupo inglés les encantarán.
“Plastic” nos remite a los años ochenta, cuando “Brotherhood” dominaba el mercado y los chicos utilizaban Aqua Net; los coros de divas invitadas y su ambiente disco nos crea una nostalgia por aquella época. “Tutti Frutti” es una delicia, una larga transición instrumental, el uso de sintetizadores y la voz de Elly Jackson (La Roux) crea un camino que jamás habían transitado por completo y que continúa con una tenue pausa en “Peole On The High Line”.
Morris y Gilbert un día se iluminaron en su granja en Chesire, al noroeste de Inglaterra y crearon “Stray Dog”, obra casi instrumental con la intervención de Iggy Pop que le da con su antaña y aguardientosa voz un toque tenebroso y gótico ¡La mejor del disco!
“Academic” y “Nothing But A Fool” son un par de “joyitas”, pero la segunda, con sus ocho minutos de duración es un inminente homenaje al “Technique” de 1989. “The Game” pasa sin pena ni gloria pero “Superheated” es la gran sorpresa del álbum; gracias a la ayuda de Stuart Price (Seal, Keane, The Killers) en la producción, Brandon Flowers se escucha impecable y hasta maravilloso (¡aunque usted no lo crea!) al lado de Summer… gran cierre ante la ausencia de una década sin música.
Sin duda, Music Complete sorprenderá a más de un fan acérrimo a la primera etapa de New Order y supera a lo intentado en “Get Ready” (por las colaboraciones) el quinteto británico tiene un regreso infalible con acordes sanos y de gran octanaje.
Aquí los dos sencillos de Music Complete que ha puesto a la orden de sus fans New Order: