ARTÍCULOS RECIENTES DE:

anibal

Columnista. Ganador del Premio Nacional de Periodismo en Chilango por "Adán, Eva y el cuadro de la tentación". Ingenuo defensor de las causas justas, atlantista y tripero.

La noticia decía algo así: “Identifican cuerpo desollado como normalista de Ayotzinapa”. ¿Desollado? Como al texto que en ese 2014 refería el cadáver de Julio César Mondragón no lo acompañaba ninguna foto, acudí a la RAE en pos del…


“Roma, agotadas todas las funciones”, advertía el cartel fuera de la Cineteca Nacional con excesiva dureza. Pero Roma, me juraban, era esencial para la supervivencia del alma: verla era como respirar. Por eso dije: “entro”. Ni soñar con verla…


Lo veía a la distancia: desde Insurgentes, entre el gris opresivo del norte capitalino, un mosaico habitacional sobre la falda de un cerro irrumpía alegre, fulgurante. Descargaba verdes, rojos, azules a la atmósfera de humo. El Parque del Tepeyac,…


“Camarena quiere hablar contigo”, oí por mi celular, y esas palabras cambiaron mi vida. Fotógrafo de Chilango, Pepe Castillo me avisó hace 12 años que me buscaba un periodista al que yo asociaba al cosmos de nuestro oficio, remoto…


La mano de Jaimito es una boa voraz que serpentea hasta los escondrijos más oscuros, inhóspitos, tras la presa del día que será su alimento. Pero la mano de este hombre —al que con 60 años se le cayeron…


El sobre se deslizó bajo una puerta de la colonia Del Valle. Si en ese instante hubiera podido expresar sus emociones, exhalando, extenuado, habría dicho: “por fin”. Habían pasado 90 días para llegar a destino. Noventa, desde que un…


He visto al Mago Merlín con su canosa barba encrespada, áspera, espesa, con cada uno de sus pelos deslavados como venas de sabiduría, todo el día de hoy. Pero en mi mente no brota con su largo saco café…


Aventó la mochila y, como leopardo, saltó al piso de su cuarto para abrir una revista. «¿Hay tarea, hija?». Desde la sala oí un breve «sí» distraído, despreocupado, cortante. «Hagámosla», ofrecí. Un minuto, dos, tres. Nada. Caminé y observé…


Quería conocer la casa de los espantos y a su jefe: hombre colosal como ogro, con ojitos microscópicos que trepanaban al mirar. Sentía dentro mío a un niño que buscaba emociones en la que, sospechaba, sería una oficina macabra:…


Al caer la noche, dos arcos bañados en naranja de fuego abrazan fulgores amarillos que encandilan y conducen a un óvalo verde de centellantes círculos verdes. En los bordes, múltiples destellos: explosiones lumínicas entre verdes trazos geométricos. «Es el…


Chilango Menú Footer Chilango recomienda