El 13 de mayo de 1942, hace exactamente 80 años, nuestro país se estremeció con una impactante noticia: Fuerzas militares nazis habían atacado el buque mexicano Potrero del Llano. Tras estos hechos, que cobraron la vida de 14 tripulantes, México abandonó la neutralidad y entró en la Segunda Guerra Mundial.

¿Ya conoces este suceso histórico que marcó el rumbo de nuestro país a mediados del siglo XX? Acomódate en tu asiento, porque hoy te contaremos todo lo que debes saber al respecto.

Poco antes de entrar al conflicto

Como recordarás, hasta antes de 1942 nuestro país se mantenía al margen del conflicto bélico que azotaba a gran parte de las potencias mundiales. Si bien ya había participado en bloqueos económicos y en protestas contra los gobiernos nazis y fascistas, lo cierto es que México abogaba por mantener, en la medida de lo posible, una posición de neutralidad.

Sin embargo, todo esto cambió en abril de 1941, cuando el presidente Manuel Ávila Camacho ordenó incautar 13 barcos (8 italianos y 3 alemanes) que se encontraban en costas mexicanas. Entre ellos se encontraba el Lucifero, un buque de Italia que terminó por ser rebautizado como Potrero del Llano.

A partir de esta incautación, la posición de México en torno al conflicto ya se mostraba menos neutral a la vista de los gobiernos internacionales. Desde entonces, la situación de hostilidad con Alemania e Italia comenzó a agudizarse y, finalmente, las tensiones escalaron hasta convertirse en amenazas.

En efecto, durante marzo de 1942,las fuerzas alemanas advirtieron que las embarcaciones con bandera mexicana debían cesar sus envíos de petróleo a Estados Unidos; asimismo, señalaron que atacarían cualquier nave del sur de América que estuviera armada.

Sin embargo, ninguna de estas advertencias se materializó hasta varios meses después, cuando Alemania decidió tomar medidas contra México por medio de las armas.

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Así fue el ataque contra el buque mexicano Potrero del Llano

El primero de estos ataques tuvo lugar el 13 de mayo de 1942 a las 23:55 de la noche, cuando el buque petrolero Potrero del Llano navegaba en aguas internacionales, a la altura de las costas de Florida. Allí, un submarino nazi lo identificó y lo atacó con torpedos hasta causar su hundimiento.

Como resultado de este bombardeo, 14 tripulantes perdieron la vida, entre jefes, oficiales y marinería que se encontraban a bordo de la embarcación. Al día siguiente, el pueblo mexicano quedó conmocionado con la noticia del ataque y comenzó a discutirse la posibilidad de que México entrara en guerra contra los países europeos.

Por su parte, el gobierno de nuestro país lanzó una protesta enérgica contra las naciones del Eje, encabezadas por Alemania, Italia y Japón, y señaló que habían violado el derecho internacional. Además, exigió que los gobiernos responsables repararan el daño antes del 21 de mayo; de lo contrario, México tomaría acciones en su contra.

En lugar de brindar una respuesta pacífica, el ejército nazi volvió a arremeter contra nuestro país. Fue así como el 20 de mayo de 1942, tan solo una semana después, atacó el buque petrolero Faja de Oro. Se trataba de otra embarcación incautada a Italia, la cual volvía de Estados Unidos tras desembarcar miles de barriles de petróleo crudo. En esa ocasión, fallecieron nueve personas de las 37 que se encontraban a bordo.

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México entra a la Segunda Guerra Mundial

Al día siguiente del segundo ataque, Ávila Camacho convocó al Congreso para discutir la pertinencia de declarar el estado de guerra en México. Sin embargo, la decisión final se dio a conocer hasta el 28 de mayo y entró el vigor el 1 de junio: Nuestro país había entrado oficialmente en la Segunda Guerra Mundial.

Entre las medidas que México tomó como parte de este conflicto se encuentra la incautación de propiedades de personas japonesas, italianas y alemanas al interior de la República; asimismo, en 1945, el icónico Escuadrón 201 participó directamente en un enfrentamiento bélico, la Batalla de Luzón en las Islas Filipinas junto al ejército estadounidense.

También se instituyó el Servicio Militar Nacional como instrucción obligatoria para los varones; todo ello con el objetivo de incrementar las fuerzas regulares del Ejército Mexicano y contar con lo necesario para defender la soberanía nacional.

Cabe destacar que el Potrero del Llano y Faja de Oro no fueron los únicos buques mexicanos que resultaron destruidos por las fuerzas alemanas durante el conflicto. Después de que México saliera de la neutralidad, Alemania atacó también el Túxpam, Las Choapas, Oaxaca y Amatlán, dando un total de seis naves bombardeadas.

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