Historia de la Glorieta de las Mujeres que Luchan
Hoy es el punto de partida de las marchas feministas del 8M, pero antes la Glorieta de las Mujeres que Luchan tenía otro significado.
Por: Edgar Segura
Hoy es el punto de partida de las marchas feministas del 8M, pero antes la Glorieta de las Mujeres que Luchan tenía otro significado.
Se trata de un espacio que ha sido resignificado y reapropiado por mujeres y pueblos originarios.
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La antigua Glorieta de Colón
Ubicada sobre Paseo de la Reforma, donde confluyen las actuales calles de Versalles e Ignacio Ramírez con la Avenida Morelos, esta fue una de las primeras glorietas de CDMX en contar con un monumento.
En 1877 se instaló allí una estatua de Cristóbal Colón donada por Antonio Escandón y construida por el artista francés Enrique Carlos Cordier.
La escultura de Colón permaneció allí hasta 2020 cuidando el Gobierno de CDMX le retiró en medio de amenazas de grupos feministas y colectivos de pueblos originarios que pretendían derribarla. Y es que, para estos movimientos sociales, Colón representaba los crímenes cometidos durante la conquista y la colonia, al grado de ser considerado un genocida.
Esta no fue la primera vez que movimientos sociales exigieron retirar la estatua. Por ejemplo, en 1992 integrantes de la la Coordinadora 500 años de Resistencia Indígena y Popular intentaron derribarla atándole cuerdas y jalándola con un camión de la Ruta 100. Sin embargo, no lo lograron debido a la intervención de los granaderos.
No fue sino hasta el 10 de octubre de 2020 cuando el reclamo fue escuchado. La estatua de Colón se retiró ante las nuevas amenazas de derribarla.
Las mujeres que luchan por su dignidad y por su glorieta
Poco a poco la Glorieta comenzó a ser utilizada como punto de reunión, de manifestación y de protesta por parte de colectivas feministas, familiares de desaparecidas y de víctimas de feminicidios. Se formó así el Frente Amplio de Mujeres que Luchan (FAML), que bautizó a la glorieta como actualmente se le conoce.
Ese mismo año se le colocó a la glorieta una estatua de una mujer con el puño izquierdo en alto como símbolo de lucha y resistencia. A esta estatua se le conoce como Antimonumenta. Además, tiene también los nombres de las mujeres víctimas de la violencia y luchadoras sociales pintadas sobre los muros metálicos que rodean el monumento.
Desde entonces, el espacio es sinónimo de sororidad y símbolo de la lucha de las mujeres por sus derechos y en contra de la violencia de género.
No obstante, mantenerla así ha implicado una disputa con las autoridades. El gobierno de CDMX ha intentado utilizar el espacio para colocar distintos monumentos.
Por ejemplo, se intentó colocar allí una estatua de Tlali realizada por Pedro Reyes.Supuestamente su objetivo era rendir homenaje a los pueblos indígenas. Sin embargo, fue rechazada porque en el proyecto se ignoró a los pueblos originarios.
Actualmente el Gobierno busca colocar en la glorieta una estatua conocida como La Joven de Amajac. Las autoridades intentaron reubicar la Antimonumenta. Sin embargo, esta se mantiene en la glorieta gracias a la lucha de las mujeres por defender su espacio.