El 17 de enero de 1974 se inauguró el lugar que pasaría a ser el preferido de lxs cinéfilxs de la CDMX: la Cineteca Nacional. Ya existían antecedentes de instituciones dedicadas a salvaguardar los archivos fílmicos de México. Uno era la Filmoteca Nacional (1936) y otro la Filmoteca de la UNAM (1960).
No obstante, en los 70 surgió el Plan de Reestructuración de la Industria Cinematográfica Mexicana a cargo del Banco Nacional Cinematográfico. La idea era edificar un espacio dedicado a la promoción, exhibición y protección del acervo fílmico del país.
Se decidió que la solución sería una cineteca y la sede estaría en uno de los Foros de los Estudios Churubusco. Contaba con dos salas de proyección y un área de bóvedas donde se preservaban distintas películas. Asimismo, tenía un área de exposiciones y un taller de mantenimiento y reparación de cintas.
En aquel primer día de inauguración arrancaron con una función de ‘El compadre Mendoza’ (1933), un film de Fernando de Fuentes. El evento fue todo un éxito y rápidamente se convirtió en un sitio concurrido de la capital.
A finales de la década de los 70 dio inicio la Muestra Internacional de Cine y en 1980 se organizó el primer Foro Internacional de la Cineteca.
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El incendio que acabó con todo
El 24 marzo de 1982 un terrible incidente destruyó las primeras instalaciones. Un incendio, que aparentemente había iniciado en el sótano, dañó de forma importante la edificación y acabó con la vida de algunxs de lxs asistentes que se encontraban en el lugar.
El fuego no cesó por casi 21 horas y muchos de los archivos fílmicos que se habían recuperado con los años, se habían perdido. Guiones, negativos, imágenes y libros fueron parte de lo que terminó destruido en aquella ocasión.
No se sabe qué fue exactamente lo que comenzó el incendio, pero lo que sí era seguro es que el edificio ya no podía ser ocupado. Hoy en día ese espacio que algún día fue la Cineteca Nacional es el Centro Nacional de las Artes.
En junio de ese año comenzaron los esfuerzos para recuperar este lugar. La iniciativa estuvo liderada por Mario Moreno ‘Cantinflas’ y el director de fotografía Gabriel Figueroa. Además, existió un comité especializado que se encargó de reunir material fílmico de distintas partes para que formara parte del nuevo acervo de la Cineteca.
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La nueva Cineteca Nacional
La obra estuvo a cargo de Manuel Rocha y el 27 de enero de 1984 el recinto cultural inauguró su nueva sede. Ahora se encontraba ubicada en la Plaza de los Compositores de la Avenida México-Coyoacán.
En 2011 se buscó modernizar el espacio para atender de mejor manera la demanda que tenía. Fue así que el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) impulsó la iniciativa de construir más salas de proyección. Actualmente se cuenta con diez y cada una lleva el nombre de importantes personajes en la historia del cine, como Ismael Rodríguez y Luis Buñuel.
Además, se edificó un laboratorio de restauración digital, una videoteca y una bóveda con la capacidad de resguardar hasta 50 mil filmes. Por último, desarrollaron el Foro al Aire Libre ‘Gabriel Figueroa’ y espacios destinados a comercios.
Para 2014 existía un deseo de compartir, educar y ayudar a crecer a lxs nuevxs cineastas y a aquellas personas interesadas en el séptimo arte. Así nació el Departamento de Extensión Académica, dedicado a ofrecer talleres, diplomados y conferencias sobre la industria cinematográfica.
Esta institución tiene más de 40 años resguardando obras y compartiendo historias con la gente. Asimismo, se ha convertido en el mayor promotor y guardián de nuestro patrimonio cultural cinematográfico. Probablemente lo más importante y bonito que nos ha regalado la Cineteca Nacional es poner al alcance de todos un cine de calidad que nos permite imaginar, soñar y crear.