En vez de tirar los residuos orgánicos, puedes usarlos para hacer composta en casa y así ayudar al Planeta. Acá te decimos cómo armar la tuya.
Si acostumbras tirar los residuos orgánicos, quizá quieras pensarlo dos veces la próxima vez y mejor hacerlos composta en tu casa. Es una actividad que no te quitará mucho tiempo, y le ayudarás al Planeta al preparar tierra fértil en lugar de generar más basura.
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¿Qué necesitas?
Primero tenemos que decirte que hay varios tipos de composta, pero la más sencilla es la seca. Las otras son: lombricomposta (necesitas lombrices), bokashi, caliente, a tierra, de fermentación aerobia, industrial, poposta (con heces de mascota pero nunca debe ir a un huerto y se necesita mucho sol), y de granja.
Entonces, sí ya te decidiste, checa lo que necesitas y que seguro tienes en tu hogar. Puedes guardar los residuos orgánicos en un bote en tu refri para no atraer moscos o insectos, y sacarlo una vez a la semana para hacer tu composta seca.
- Residuos orgánicos, es decir los de las frutas y verduras en trocitos.
- Cáscaras de nueces, pistaches, cacahuates, huevo.
- Huesos de aguacate pero ya secos para poder cortarlos.
- Cítricos exprimidos y después de secarlos al sol.
- Pelusa que queda en la lavadora y/o secadora. Si usas bolitas para atraparla, sólo es cosa de quitárselas.
- Servilletas y/o servitoallas de material reciclado (suelen ser color café), pues no contienen cloro.
- Luffa o esponja para trastes hecha a base de plantas, córtala en pedacitos.
- Polvo que recoge la aspiradora.
- Hojas de tamal limpias, pero cortadas en pedazos.
- Resto de poda de plantas.
- Flores secas.
- Residuos de lápices (por ejemplo lo que sale cuando les sacas punta), madera y periódico.
- Cabello y uñas, incluso de tus mascotas, al ser materiales orgánicos o sea biodegradables.
Por cierto, una composta tiene carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, ¡qué tal! Pero, ojo, no le pongas esto: plástico, papel no biodegradable, restos de comida cocinada, productos lácteos, huesos/restos de animales y conchas de crustáceos.
¿Cómo hacer tu composta en casa?
Para hacer tu composta casera necesitas un compostero, pero si tu presupuesto no te lo permite hay opciones muy económicas y que funcionan perfecto. Puedes usar: huacal, costal o cubeta vieja a la que le puedas hacer hoyos para que respire todo lo que le meterás. También puede ser una maceta de barro sin pintura y sin barnizar, de preferencia con orificio en la parte inferior. O, puedes cavar un hoyo en alguna parte de tu jardín, sólo que sea donde le dé el sol y aire.
Acá te va el paso a paso:
- Pon una capa de materiales secos al fondo. Estos pueden ser hojas secas cafés que se rompen con facilidad, no uses verdes o negras. También aserrín, cartón de huevo en pedacitos, tierra seca y/o flores secas.
- La siguiente capa debe ser de productos orgánicos
- Luego una capa más de materiales secos para tapar
- Repetir los pasos anteriores
Dependiendo del clima, entre 5 y 7 semanas verás que todo se ha hecho abono; ayudan más los días soleados que los lluviosos o el invierno. Si es época de lluvias, tápala bien o ponla bajo techo. Y, muy importante, puedes revolverla una vez por semana o con cierta periodicidad.
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¿Por qué es bueno hacer tu composta en casa?
Además de conseguir tierra fértil en vez de generar más basura y contaminar, estas son otras buenas razones para que te pongas a hacer tu propia composta:
- Restaura los ecosistemas al no generar basura mientras tú te haces responsable de tus residuos creando algo útil.
- El abono que se hace es un nutriente para el suelo/tierra y para tener más espacios verdes y nutridos en tu jardín o huerto.
- Es la forma más fácil, accesible y rápida de regresar nutrientes al suelo.
- Ayuda a atrapar dióxido de carbono y evitas contaminar el aire cuando tiras lo orgánico al camión de basura y va a dar a un vertedero abierto. Con las bolsas cerradas y el sol se libera gas metano, y contamina el aire que respiramos, lo que contribuye al efecto invernadero.
- Un suelo nutrido ayuda a capturar dióxido de carbono. Evitar generar basura orgánica reduce las emisiones de gas metano, y de esta forma limpiamos el aire.
- Si tienes un huerto en casa, consigues alimentos de mejor calidad porque le darás abono nutritivo a la tierra donde siembres.
- No necesitas gastar agua, algo vital para el Planeta.
- Se cierra el ciclo de la materia orgánica y así restauramos los suelos.
También es importante mencionar que le echas una mano a los trabajadores de centros de acopio y los pepenadores. ¿Cómo? Ya no tienen que tocar cosas como las cáscaras de huevo cuando están tratando de rescatar materiales para reciclar.
Así que, ¿listo para hacer tu composta en casa? No te va a tomar mucho tiempo, y puedes hacerla una vez por semana.
Ojo, si de plano no tienes tiempo o espacio, contacta a Hagamos Composta, Huerto Roma Verde o Rescate de Barrancas Santa Fe, ¡ellos la hacen por ti!
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