Refranes y atole… vaya tema catedrático. Sí, quizá suena un poco absurdo este tema, pero no seríamos de Chilangolandia si no viviérmos en el absurdo. Esta lección del Diccionario Chilango te va a ayudar a accionar ese verbo refranero que traes empolvado.
Primero te vamos a dar una embarrada de conocimiento con los orígenes del atole. Luego a lo que nos truje le entramos directo a los refranes. Seguro con esto ya no te van a agarrar de bajada. Y ni hablar de seguir actuando como alguien con atole en las venas. Deja que el conocimiento refranero te entre sabroso.
Te puede interesar: Un fermento tan chilango como el bolillo: conoce el mítico origen del tepache 🤤
Del origen de la rica palabra: atole
El origen de la palabra “atole” te sorprenderá por su sencillez. Pregúntate primero: ¿cuántas veces te imaginas que has pronunciado la palabra “atole” en tu vida? Tan solo piensa en el mismo número que has dicho “guajolota verde con pollo” y ahí lo confirmarás.
Pues bien, vámonos recio o sería mejor decir: vámonos ¡aguado! Así es, “atole” proviene del náhuatl atolli que significa literalmente ¡aguado! Esta palabra está formada por los vocablos atl (agua) y olli (líquido viscoso). Es como tal una bebida caliente de origen prehispánico hecha a base de maíz molido.
En la actualidad no solo lleva maíz. ¡Ya hay atoles de todos sabores! Empecemos por los más calóricos: cajeta, lechera, nutella, galleta, ¡hasta de ‘beiliz’ (Bailey’s)!
Y ahora repasemos los más naturalitos: champurrado, de arroz, guayaba, pepita, pinole, amaranto, limón, fresa, eso sin contar las variedades de otros estados. ¡Aunque eso que ni qué! Atole chilango solo hay uno, y ese… es el champurrado. Solían prepararlo en el imperio mexica con los mismos 3 ingredientes: maíz, cacao y agua.
Esto te puede interesar: Mini guía infalible para aprender a catar un buen mezcalito
Atole que no has de beber…
Ahora sí, abramos el Diccionario Chilango para repasar algunos de los refranes que tienen que ver con atole. Porque ya sabes lo que dicen: ¡atole que no has de beber… entonces baja el codo!
Refranes:
- Dar atole con el dedo: Seguro te la han aplicado muchas veces. Quiere decir que te están viendo la carota, que te engañaron pues.
- Tienes atole en las venas: Si eres caradura o no reaccionas emocionalmente a las situaciones este seguro te lo han dicho mucho.
- Con la que entiende de atole, escoba y metate, con ésa cásate: Este nos choca porque se ve a leguas que es machista pero bueno. Conócelo para que no lo apliques y no te lo apliquen. Este refrán se utiliza en algunos pueblos originarios.
- Más vale atole con risas que chocolate con lágrimas: Mejor pobre y feliz que con riqueza y tristeza.
- No se puede chiflar y beber atole: Las cosas bien hechas se hacen una a la vez. ¡No multitasking!
- Si con atolito vamos sanando, pues atolito vámosle dando: Eso que te sirve sigue haciéndolo. ¡No innoves! Vete por lo seguro.
- Como dueño de mi atole, lo menearé con un dedo: Por mis pistolas si yo hice algo se hace a mi manera. Este es perfecto para personas tercas.
- Contigo la milpa es rancho y el atole champurrado: Este es para romancear. Es recordarlo todo color amor. Esas primeras etapas del enamoramiento en donde todo es maravilloso.
- Se está enfriando el atole: Esto dedícalo a quien ronca. El sonido de sorber el atole dicen que se parece al ruido cuando roncas. ¿Será?
¡Nambre! Ahora sí con estos refranes seguro no te van a dar atole con el dedo. Ya desempolvado el Diccionario Chilango ahora solo falta echarlo a andar. Con prática… ¡hasta el atole!
