Descubre cuáles fueron los primeros grupos y artistas de rock que ofrecieron conciertos masivos en la CDMX.
Aunque no lo creas, los conciertos de rock, sobre todo de talla internacional, llegaron no mucho tiempo atrás a tierra chilanga. Para contar su historia debemos remontarnos a los 60´s.
Así fue el concierto gratuito de Caifanes en la Venustiano Carranza
En aquella época, los jóvenes comenzaban a alzar la voz en contra de las injusticias y de quienes los oprimían. Por ello, se empezaron a identificar con la música de artistas que hablaban de rebeldía y libertad.
En 1969 llegó Woodstock a Estados Unidos, el festival de música que abrió la puerta para que grupos de rock tuvieran espacios en donde pudieran tocar frente a grandes audiencias.
Dos años después, México intentó hacer su propia versión de este evento con el Festival de Avándaro.
Miles y miles de jóvenes mexicanos se dejaron llevar por la música y se permitieron vivir una emoción desenfrenada.
Esto provocó que tanto los medios de comunicación, los grupos conservadores del país y el mismo Gobierno Federal satanizara los conciertos masivos y prácticamente los prohibiera.
No obstante, el público chilango demandó que sus grupos de música preferidos llegaran a la ciudad, y así fue.
Sin embargo, poco se sabía de la organización de este tipo de eventos en ese entonces. Debido a esto, diferentes incidentes llegaron a suceder durante estas presentaciones.
Los conciertos de rock que enloquecieron a la CDMX por primera vez
Antes de que se pudieran llevar a cabo este tipo de eventos en la capirucha, existieron algunos intentos fallidos como el caso de The Doors.
El grupo llegó a México en 1969 con la promesa de cuatro conciertos en la Plaza de Toros.
No obstante, y por razones que aún no son claras, la banda de rock se tuvo que presentar en ‘Forum’, un recinto más pequeño y para un público selecto.
Un grupo que sí se presentó en la capirucha y que se llevó una tremenda sorpresa, fue Chicago en 1975.
La cita era en el Auditorio Nacional y estuvo acompañada de un enorme caos por parte del público capitalino.
Para empezar, el concierto empezó tarde y la gente intentó dar portazo. Las autoridades usaron gas lacrimógeno para ‘calmar’ a la gente y hubo varios detenidos.
En 1980, The Police se presentó en lo que hoy conocemos como el World Trade Center y que en ese entonces era el Hotel de México. Este concierto no fue tan caótico como el anterior, pero sí fue extraño.
La tocada se hizo en uno de los salones de eventos del recinto y por ello, el público llegó con vestimenta elegante que no tenía nada que ver con la música.
Recordemos que la gente aún estaba aprendiendo cómo vestir y comportarse en este tipo de situaciones.
De acuerdo con los testimonios de algunos de los miembros de la agrupación, esto no impidió que los asistentes enloquecieran y bailaran al ritmo de ‘Roxanne’.
Casi 30 años más tarde, el grupo inglés regresó a la CDMX, pero ahora al Foro Sol.
Tras el desorden, llega un final feliz
Cabe mencionar a algunos otros conciertos importantes que dieron pie a que la CDMX se pusiera pilas y acondicionara espacios para estos conciertos. Uno de ellos fue el de Johnny Winter en Pachuca (1980).
La gente comenzó a aventar objetos al escenario y el evento se canceló.
Otro caso es el de Queen, quienes curiosamente llegaron a Monterrey y después a Puebla en 1981.
De acuerdo con algunos de los asistentes, en este último estado, los británicos también fueron atacados con objetos voladores.
Para 1988, y después de una larga sequía de conciertos en la CDMX, Miguel Ríos se presentó en la Plaza de Toros sin mayores problemas.
Esto fue gracias a que distintas estaciones de radio como Rock 101, invitaron a los asistentes a evitar actos violentos que pudieran provocar que el español no saliera al escenario.
Con el paso de los años y con las lecciones que estos incidentes dejaron a los productores y público capitalino, la Cd. de México se fue transformando en uno de los lugares favoritos de todo tipo de artistas.
Así, la capital logró recibir a grandes del rock como U2, Rod Stewart, Los Rolling Stones y muchos más en años siguientes.