El día que El Chucky Lozano provocó un sismo en México
Estamos en pleno año mundialista y aunque debemos esperar unos meses. Hoy recordamos el día que El Chucky Lozano provocó un sismo en México
Por: Editorial M&E
Vía: Obed Ruiz
Un día como hoy pero de hace cuatro años. “El Chucky” Lozano provocó tal algarabía que México se cimbró por un momento. En un México VS Alemania del mundial. El día que El Chucky Lozano provocó un sismo en México. Pero, ¿es realmente posible que miles de personas hayan provocado un movimiento de tal magnitud?
El fútbol despierta un sinfín de emociones en los aficionados que se reúnen para disfrutar -o sufrir- un partido. Sin embargo, en algunas ocasiones la euforia colectiva es capaz de mover algo más, como ocurrió hace cuatro años con el gol de Hirving “El Chucky” Lozano frente a Alemania en el debut de México en Rusia 2018, el cual dio la victoria y abrió paso al surgimiento del mito (mal) llamado ‘gol del sismo’.
La mañana de aquel domingo 17 de junio, Xyoli Pérez Campos, investigadora del Servicio Sismológico Nacional (SSN), estaba desayunando con su familia por el Día del Padre cuando otra celebración, la del gol, irrumpió en la mesa.
“Se detecta #sismo en la Ciudad de México durante el Gol de la selección en el mundial”, publicó en su cuenta de Twitter a las 10:37 a.m. el Departamento de sismología y vulcanismo del Instituto de Investigaciones Geológicas y Atmosféricas A.C.
“El #sismo detectado en la Ciudad de México se originó de manera artificial. Posiblemente por saltos masivos durante el Gol de la selección de #México en el mundial. Por lo menos dos sensores dentro de la Ciudad lo detectaron a las 11:32”, amplió la cuenta siete minutos más tarde junto a los resultados de sus dispositivos y el error de la hora.
Entre la frustración y la oportunidad
Casi de inmediato, la Red Geocientífica de Chile hizo segunda al asegurar que sus instrumentos de medición también registraron el movimiento instantes después de que Lozano recortó dentro del área grande para vencer a Neuer con un fuerte disparo que estremeció más que las redes.
“Nuestros dispositivos de alerta sísmica de @SismoDetector también detectaron el sismo artificial en tiempo real, la aceleración máxima llegó a 37cm/s2. Al mismo momento del gol de #MEX ante #GER”, constató la institución chilena a manera de respuesta en el primer tuit.
El mito del sismo por la celebración despertó un doble sentimiento en la Doctora Xyoli: el primero de frustración porque otra vez había ese tipo de comentarios erróneos sobre supuestos sismos artificiales, y por otro, uno positivo para aprovechar la oportunidad de medir las vibraciones del suelo al replicar un estudio de señales que inició hace más de una década en el Estadio Olímpico Universitario.
Si no hubo sismo, ¿qué pasó?
Los datos del Departamento de sismología y vulcanismo del Instituto de Investigaciones Geológicas y Atmosféricas A.C. Y la Red Geocientífica de Chile existen y fueron generados por los festejos. Sin embargo, los mexicanos reunidos en el Zócalo no provocaron un “sismo artificial”. Los sensores de ambas instituciones se activaron y registraron el movimiento de concentraciones de personas que se encontraban cerca a la hora de festejar el gol sorpresivo ante el entonces campeón invicto; como ratificaron horas más tarde.
“Hay una confusión. No generamos un sismo. Pero sí podemos generar vibraciones en el suelo que produzcan movimiento en otro lugar como producto de la energía que le imprimimos. Con nuestros pasos y nuestros brincos generamos vibraciones en la tierra, pero en la superficie en donde estamos parados o saltando. Llamemos sismos a esos eventos que se generan por la ruptura del material dentro de la tierra y que sentimos en otros lugares; como el del 19 de septiembre de 1985. Un sismo implica movimiento de tierra”, explicó a CHILANGO la Dra. Xyoli.
Un salto de 74mil personas
Aunque resulte difícil de imaginar; el suelo, al igual que las ligas, el plástico o incluso una roca, tiene propiedades de elasticidad, al igual que todos los materiales. Con la diferencia de que algunos resisten más ante los esfuerzos que se les imponen. La elasticidad del suelo permite generar una especie de efecto rebote en el cual sufre deformaciones y luego regresa a su punto de origen (sube y baja, como en un brincolín a menor escala). En el caso del gol de Lozano; las vibraciones fue generado por la fuerza de las 74 mil personas reunidas en el Zócalo para ver el México vs Alemania.
“Cuando saltamos celebrando, si saltamos todos disparejos, es como las gotas de lluvia que caen y forman ondas pequeñas que se van deshaciendo; por lo cual no se ve como un gran conjunto de círculos expandiéndose, sino como muchos círculos pequeños que se destruyen porque las gotas caen en diferentes momentos y lugares. Pero si nos coordinamos y saltamos al mismo tiempo es una gran masa de personas y eso hace que se logre registrar a grandes distancias”. detalló Pérez Campos.
El día posterior al juego, el SSN publicó un reporte especial sobre el 17 de junio de 2018, entre las 10:00 a.m. y las 12:00 p.m. Momento del partido de la Selección Mexicana, donde sostuvo que se presentaron dos sismos en la Cuenca del Valle de México; ambos aislados a la celebración del gol al ser eventos que responden a las condiciones naturales de la zona.
Trigrama, cómo medir la pasión por el ‘Tri’
A raíz del primer juego de México y el resurgimiento de un mito que cuenta con antecedentes tanto en el fútbol (Barcelona 2015; gol de Messi, Leicester 2016, en el King’s Power Stadium o el más conocido; “el gol del terremoto” de José Perdomo en Argentina, 1992). Como en otros deportes y eventos masivos como conciertos; la sismóloga y su equipo se dieron a la tarea de recopilar las vibraciones generadas en el corazón de la Ciudad de México en los tres partidos restantes del ‘Tri’ en Rusia.
El compendio de datos se hizo mediante la instalación de un sismómetro en una de las esquinas de la plancha del Zócalo y su cruce con la calle 20 de noviembre para encontrar y medir la señal de las vibraciones generadas por los aficionados.
La detección de la señal producida durante los partidos se realizó a partir de la base de que la mayoría de los movimientos naturales tienen frecuencias de vibración identificadas; como el de las mareas. Que es de 1 Hert (Hz) por minuto, es decir, crean una vibración por segundo, menos de la frecuencia de la euforia futbolera; que es de 2 Hz, dos “golpes” al suelo por segundo. Tarda un instante en que se sincronice entre miles de simptizantes. Por lo que un festejo de gol alcanza su punto más álgido después de siete segundos.
Los momentos de Climax en Rusia 2018
Estos momentos de clímax se dieron en la fase de grupos de Rusia 2018 con el segundo triunfo consecutivo y la clasificación a los Octavos de Final, pese a la derrota.
“En el juego contra Corea del Sur se ven muy bien los goles y después de que acabó el partido de Suecia. Aunque no ganamos, se ve la euforia de la gente de que pasamos (a la ronda siguiente)”. Comparte con emoción la investigadora.
En cuanto a distancia, las ondas de los aficionados en la plaza central no alcanzaron a viajar a la estación más próxima, ubicada a cinco kilómetros; punto en la cual los instrumentos de medición respondieron a otras vibraciones cercanas.
“Veíamos en otras estaciones el registro, pero claramente no venían de la misma fuente. Sino que en una estación veíamos que el efecto era local porque estaban viendo el partido en el bar o algún restaurante al lado; la fuente del Zócalo estaba muy lejos para que esa estación lo detectara”. Completó la Dra. que a pesar de no ser seguidora del fútbol es especialista en analizar las señales y vibraciones generadas durante partidos desde una casualidad hace 19 años.
Pumagrama: vibraciones hechas en CU
Uno de los primeros domingos de 2003 una becaria del SSN estaba de guardia en la sede, donde hay una alarma que suena cuando la estación excede ciertos umbrales en el registro. De tal manera que se pueden revisar los registros para localizar un sismo.
Al mediodía la estudiante estaba tranquila cuando la alarma sonó repentinamente; por lo que corrió al registro y no encontró sismo alguno. Acción que se repitió con el mismo resultado fallido en un par de ocasiones, hasta que la incertidumbre la hizo prender la televisión y sintonizar el partido de los Pumas para relajarse.
Los auriazules jugaban en el Estadio Olímpico Universitario, a dos kilómetros del Instituto de Geofísica, sede del SSN dentro de Ciudad Universitaria. Con el paso de los minutos el partido tuvo jugadas emocionantes y fue ahí donde la estudiante reconoció el origen de las señales previas.
Revisó junto a un compañero los registros durante los partidos de esa temporada de Pumas como local y encontraron una correlación entre las vibraciones y los mejores momentos. En una visita al Instituto, mientras estudiaba el posgrado en el extranjero; Xyoli Pérez platicó con los estudiantes y se interesó por el tema. Pues a pesar de no ser seguidora ferviente del fútbol, le interesa el análisis de las señales que provocan sus aficionados.
“Cómo no te voy a querer”
Por si quedaban dudas, la plática fue interrumpida por un estudiante español que comenzó a saltar al compás del conocido cántico ‘Cómo no te voy a querer’; entonado por los seguidores universitarios al final de los partidos. Ritmo pegajoso que también permitió analizar la secuencia de los saltos antes mencionada (los 2 Hz en la frecuencia de la efervescencia futbolera).
Cuatro años más tarde, Xyoli volvió como investigadora y uno de sus primeros proyectos fue poner un sismómetro dentro del Estadio Olímpico Universitario durante un partido y registrar los momentos álgidos para continuar con el estudio de aquella idea que escuchó; base para el Trigrama durante Rusia 2018.
“Me tocó ir con mi estación y sentarme adentro del estadio, cerca del túnel de salida de los Pumas. Estaba en el túnel con mi sensor y vi que la reacción no es inmediata. La gente se empieza a emocionar y después hay esta sincronización. Como que ‘La Rebel’ con su tambor empieza a sincronizar las cosas; se sincroniza en las zonas cercanas y después se expande por todo el estadio hasta que se pierde, pero hay un retraso”. Recordó la sismóloga (los siete segundos que tarda en sincronizarse la celebración en una masa de miles de participantes a raíz de un gol o un evento significativo en el juego).
El gol de “Chucky” Lozano contra Alemania le dio tres puntos al Tri. Alimentó la eterna promesa del quinto partido e hizo vibrar, en sentido material y metafórico, a la ciudad donde nació y a sus aficionados. Quienes no pueden provocar un sismo, pero demostraron que sí pueden hacer que la tierra lata a su frecuencia futbolera.
Notas
- El Instituto de Investigaciones Geológicas y Atmosféricas A.C. y la Red Geocientífica de Chile fueron contactados por redes sociales, correo electrónico y el segundo de manera personal con el director recibiendo respuestas favorables, pero ninguno respondió a la hora de solicitar fecha para hablar sobre el tema.
- La página web del Instituto de Investigaciones Geológicas y Atmosféricas A.C., donde se encontraba la explicación sobre las publicaciones del supuesto “sismo artificial”, ya no se encuentra activa; su cuenta de Twitter sí.
Fuentes
- Alemán Navarro, José Carlos y Pérez Campos Xyoli, ¿Sismos futboleros?, ¿Cómo ves?, Edición 244, marzo de 2019, pp 16-19.
- SSN (2018): Servicio Sismológico Nacional, Instituto de Geofísica, Universidad Nacional Autónoma de México, México
- ¿Por qué se activa la alerta sísmica con los goles?, Red Geocientífica de Chile, Facebook, 18 de junio de 2018.
- Melgar, Diego y Pérez Campos Xyoli, How a Soccer Stadium Helps with an Education in Science and Seismology, Seismological, Research Letters, Volume 82, Number 1, January/February 2011, pp. 115-119.
- Entrevista exclusiva con la Dra. Xyoli Pérez Campos.