En la Fábrica de Artes y Oficios (FARO) de Azcapotzalco existe un lugar donde puedes viajar más de 3000 años hacia el pasado. Se trata de una cancha de juego de pelota idéntica a la utilizaban los pueblos mesoamericanos desde el año 1400 antes de Cristo. Aquí no solo se reúnen jóvenes a echar la reta de juego de pelota, sino que se ofrecen clases gratuitas para niños, mujeres y adultos de CDMX y sus alrededores.
“Es una réplica de una cancha antigua que se encuentra en Chichén Itzá”, cuenta Juan Zamudio, integrante de la Conformidad Ollinkan, un colectivo que cada semana se reúne a jugar en el FARO. El espacio fue inaugurado en 2018. “Principalmente está pensado para los jóvenes, para que tengan la oportunidad de conocer este juego ancestral”, agrega.
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Clases gratuitas de juego de pelota en CDMX
Jorge Torres es uno de los instructores de juego de pelota del FARO Azcapotzalco. Su caso es precisamente el de uno de los jóvenes que se acercaron al juego cuando se inauguró este tlaxco, como conocían las culturas prehispánicas a la cancha. Ahora da clases gratuitas todos los lunes a las 5 de la tarde.
“No conocía nada de la cultura del juego, pero cuando se inauguró el tlaxco vine y lo visité. Me fui acercando, fui preguntando, empecé a entrenar y ya llevo 3 años practicándolo”.
Con Jorge entrena un grupo de entre 10 y 15 personas de todas las edades.
“Lo primero que les enseñamos es a hacer un calentamiento y pequeños golpes básicos con una pelota más pequeñita. El golpe es con la cadera y con la parte superior del muslo”.
La pelota con la que se realiza el juego está hecha con resina del árbol del hule. “Se va juntando con plantas y agua, se hace una pelota que cuando se seca se va comprimiendo”, cuenta Jorge. Luego “se va golpeando en una piedra para que se haga firme y dura y se cuelga en un paliacate para que mantenga la forma”.
El resultado es una pelota sumamente dura, de entre 3 y 4 kilos. Por ello, los jugadores se colocan sobre las caderas fajas de cuero. “Es importante traer una faja y tener mucha confianza en tu cuerpo”, dice Jorge.
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¡A echar la reta!
Además de las clases gratuitas, en el tlaxco del FARO Azcapotzalco se reúnen hombres y mujeres de CDMX a echar la reta de juego de pelota. Antes de iniciar, Juan realiza una ceremonia en la que pie permiso para jugar a los 4 puntos cardinales. Mientras suenan los tambores y un caracol, enciende un copal cuyo humo baña a todos los jugadores.
Juan explica que el tlaxco es una representación del universo, resultante de las observaciones astronómicas de nuestros antepasados. La pelota representa al sol. “Hay que mantener el sol, que es la pelota, siempre arriba”. Contrario a lo que pudiera pensarse, el objetivo no es dominar al rival, sino mantener la armonía.
Elevados sobre los costados de la cancha se encuentran 2 aros. Estos están especialmente orientados para que el sol los atraviese en ciertos acontecimientos astronómicos. Jorge explica que otro de los objetivos del juego es introducir la pelota en esos aros.
“Los aros representan a los óvulos de la mujer y la pelota al esperma. Entonces, en el momento en que metes la pelota en el aro reinicia la vida”.
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¿Qué significaba el juego de pelota para nuestros antepasados?
Uno el de los mayores mitos en torno al juego de pelota es el de los sacrificios humanos. Algunas versiones apuntan a que se sacrificaba al ganador. Otras a que se sacrificaba al perdedor. Sin embargo, ni Jorge ni Juan dan mucho crédito a estas versiones.
Juan comenta que “el sacrificio es muy importante porque es de uno mismo, es nuestro cansancio, es nuestro sudor, dejar otras actividades por estar aquí; no hay un sacrificio de decapitar ni de matar, tener una disciplina también es un sacrificio”. Asimismo, explica que había distintos contextos en los que se realizaba el juego:
“Hay diferentes formas de ver el juego y diferentes modalidades. A veces algunos juegos estaban relacionados con ceremonias ancestrales que tenían que ver con los astros. En ellos se personificaba lo que pasaba arriba en el universo. Otros eran juegos comunitarios o familiares y también había algunos relacionados con disputas de pueblo a pueblo para organizarse o repartirse bienes”.
Por su parte, Jorge considera que el juego de pelota no puede concebirse en términos de ganadores y de perdedores:
“Aquí todos ganamos. Perdemos las malas vibras, las malas conductas. Se gana la convivencia, la alegría, el vivir. Lo que se pierde es lo malo, eso lo desechamos”.
¿Cómo jugar juego de pelota en CDMX?
Si quieres aprender a practicar juego de pelota, puedes acudir con Jorge a su clase todos los lunes a las 5 de la tarde en el FARO Azcapotzalco. Pueden participar mujeres, hombres, jóvenes y niños de todas las edades. También puedes seguir las redes sociales del FARO y de la Conformidad Ollinkan para conocer sobre más talleres y eventos.
Además de juego de pelota, aquí hay talleres de danza prehispánica, medicina ancestral y un temazcal para la banda de CDMX. Todo es totalmente gratuito.
Dónde: FARO Azcapotzalco, en Av. Cultura Nte s/n, colonia El Rosario
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