Seguramente en alguna de tus visitas al Centro Histórico u otras zonas de la ciudad has escuchado una dulce melodía proveniente de los organilleros, quienes sin duda han llenado las calles de la CDMX con hermosas canciones, formando ya parte del folclor chilango. Es por eso que aquí te van cinco datos curiosos acerca de este personaje muy mexa:
El origen de los organilleros
1.- “Mono Cilindrero”
Probablemente ya has escuchado esta expresión, pero lo que tal vez no sabías es que hace referencia a que los organilleros en Alemania, país de donde proviene este instrumento, eran acompañados por un pequeño simio que se encargaba de recibir las monedas del público, todo con la finalidad de hacer más entretenido el momento.
Esta curiosa práctica también llegó a la Cd. de México, por lo que los antiguos cilindreros chilangos en ocasiones eran acompañados por monos araña que cumplían con estas mismas funciones. Es por eso que hoy en día te puedes encontrar con organilleros acompañados de monos de peluche, haciendo alusión a esta costumbre.
Mochila de alambre, un clásico de la chaviza chilanga
2.- Cambio en el repertorio musical
Este oficio llegó a México durante El Porfiriato, época en la cual tocaban en su mayoría canciones europeas. Sin embargo, al llegar la Revolución, los organilleros cambiaron estas melodías por canciones mexicanas populares como ‘Cielito Lindo’, pero las favoritas eran aquellas que aludían a este momento histórico en particular, como lo es ‘Adelita’.
Los organilleros: personajes muy chilangos
3.- ‘Los Dorados de Pancho Villa’
Si hay algo que definitivamente caracteriza a estos ya tradicionales músicos, son sus uniformes color beige y sus gorras militares (quepis). Esta vestimenta la utilizan debido a que se dice que al mítico Pancho Villa y a su ejército los acompañaba un organillero con la finalidad de subirles el ánimo durante sus batallas.
Por esta razón es que los cilindreros visten de esta forma, haciendo alusión al uniforme de la milicia de aquellos tiempos.
4.- Mujer chilanga al rescate
La única mujer en la CDMX encargada de reparar y rentar organillos se encuentra en Tepito; desde hace alrededor de 37 años se ha dedicado a procurar estos instrumentos, incluso aquellos con hasta un siglo de antigüedad.
Se trata de Marcela Silvia Hernández Cortés, nuera del músico Gilberto Lázaro Gaona, quien fue la primera persona en traer este increíble instrumento de Alemania a tierra chilanga. Es así como de manera casi autodidacta aprendió lo que antes era el oficio de su marido y de su suegro.
Es por esta razón que su familia llegó a tener hasta 200 organillos provenientes de distintos puntos del mundo.
@chilangocom Los gajes del oficio narrados por nuestro amigo organillero. #gajesdeloficio #organillero #vlog ♬ sonido original – Chilango
5.- Las obligadas
Debido a la misma antigüedad de este instrumento musical, cada organillo únicamente tiene ocho melodías, dentro de las cuales casi siempre se encuentran dos grandes clásicos: ‘Las golondrinas’ y ‘Las mañanitas’, además de las ya mencionadas canciones de la época de la Revolución.
A pesar de que en ocasiones te puedas encontrar con melodías más recientes, como las de Los Beatles, la razón de que no cuenten con otras canciones o con temas más modernos es debido a que no hay personas dedicadas a actualizar el repertorio de los organillos. Es por eso que parecen personajes atrapados en el tiempo.
