Las ilustradoras Diosa y Janín compartirán su proceso artístico en el MUNAVI

La Bienal de ilustración de Pictoline se sigue apoderando de los espacios culturales de Chilangolandia. Su premiación se realizó en el emblemático Castillo de Chapultepec, la muestra con los mejores trabajos fue en el Centro de Cultura Digital y hubo clases magistrales en el Museo Nacional de Antropología e Historia.

Ahora le toca el turno al Museo Nacional de la Vivienda, en donde las ilustradoras y muralistas Diosa y Janín compartirán con el público que asista, este 20 de abril de 2024, parte de la historia que las hizo considerar al arte como su motivo a seguir, así como de su proceso creativo.

Esfuerzo colectivo por el arte

Uno de los objetivos de la Bienal de ilustración es precisamente el impulsar las visiones creativas de jovenxs artistas nacionales y del mundo, por lo que para Jasmina Amalya Cazacu, mejor conocida en el círculo de arte como Diosa, esta es una gran oportunidad para compartir su camino recorrido.

“Estoy emocionada de presentarme junto con la increíblemente talentosa Janín Nuz Garcín, este sábado en el Museo Nacional de la Vivienda, como parte del programa de la Bienal de ilustración 2024 con GAMA. Compartiré un poco sobre mi historia personal, mi proceso artístico y mi recorrido en el arte urbano”, contó Diosa.

A este esfuerzo de impulso al talento juvenil se suman la galería de arte urbano e ilustración GAMMA, así como el Espacio Cultural Infonavit. En esta oportunidad, las artistas invitadas explorarán el impacto de esta forma de arte en la modificación de espacios urbanos, desde contar historias hasta promover el diálogo social.

Visiones artística

De acuerdo con GAMA, Nuz Garcín ilustra mujeres de diversa piel, ojos grandes, curvas y colores tropicales. Su inmersión en el feminismo la motivó a abordar su trabajo desde una profunda reflexión sobre el cuerpo, la forma en que las mujeres se visualizan y representan a sí mismas.

Mientras que Diosa desafía a la audiencia a cuestionar percepciones y a apreciar la magia que se esconde bajo lo mundano. Criada en Rumanía, donde se sumergió en cuentos populares y tradiciones mágicas, Amalya Cazacu encontró en la vitalidad cultural de México una fuente de inspiración que transformó su arte.

Especializada en pinturas simbólicas que exploran los misterios de la vida y la magia, las obras de Diosa actúan como portales a dimensiones fantásticas, invitando a los espectadores a adentrarse en la extrañeza del alma y la psique.