Revista Chilango

Amor por los tacos

Febrero 2017

SUSCRÍBETE AQUÍ A LA REVISTA

Síguenos en:

El lado humano de los muertitos

Recorrido por las extrañas leyendas del Panteón de San Fernando

¿Aquí espantan? Foto: Claudio Gardea ¿Aquí espantan?
18 de abril de 2016
Por    Claudio Gardea

De pronto, ves a un personaje moverse ligeramente entre las tumbas, como flotando, y  no lo crees, pero no puedes ignorarlo porque su facha no pasa inadvertida. Aunque no te queda claro si es su delgadez, la piochita, los anteojos, el traje, o todo junto, entiendes que es alguien de otro tiempo y la piel se te enchina, pues, aunque siempre has querido ver algo así, no sabes si aguantarás el impacto. De repente, escuchas algo...

¿De dónde viene la voz?

"Ésta es una charla, porque estoy consciente de que todos son muy buenos lectores, entonces no voy a aburrirlos con datos de historia, de batallas, de fechas, si ya lo saben, ¿y para qué les voy a andar repitiendo lo mismo?

En esta plática les muestro un lado que está un poco olvidado de las personas que están aquí enterradas, el lado humano. En este recorrido les voy a hablar sobre padres de familia, sobre amigos, sobre esposos, sobre personas que fueron de carne y hueso, que también sintieron, que tuvieron triunfos, fracasos, alegrías y tristezas".

La supuesta aparición es en realidad el encargado de servicios educativos del Museo Panteón de San Fernando, Rodrigo Callejas, quien, caracterizado como José María Lafragua, conduce a la gente que se arma de valor para recorrer el panteón bajo su guía. 

  • Foto: Claudio Gardea
  • ¿Aquí espantan?

    Platicamos con las personas que trabajan en el museo y nos dijeron que, al menos en este panteón, eso de los fantasmas y las apariciones es puro cuento, nadie ha oído o visto fantasmas, aparecidos o algo por el estilo...

    ¿O sí?...

    Checa la historia de la señora Carmina (nombre que le dimos para mantener su anonimato), una empleada del lugar.

    Ella sintió un fuerte golpe en la espalda cuando caminaba cerca de la tumba de Martín Carrera, presidente interino de la República desde el 15 de agosto de 1855 y renunció un mes más tarde para que Rómulo Díaz de la Vega asumiera la presidencia.

    Doña Carmina nos narró que, impresionada porque no había nadie por ahí a quien culpar del golpe, fue a mostrarle la espalda a una compañera y ella le confirmó que tenía las marcas y correspondían a una cadena.  Dice Carmina que ese golpe se lo dieron las cadenas que resguardan la tumba de Carrera...

    Y hay más...

    Ya con vuelo, nos contó:

    "Como al año de eso vi a una mujer caminando entre las tumbas, tenía un vestido blanco, de manta, con unas flores azules, rojas y amarillas estampadas. La siguiente vez vi a un señor que entró por el enrejado que está hacia el lado de la plaza, venía con calzón de manta.

    Y hace como dos meses estaba agachada, levantando algo del piso, y de pronto frente a mi noté una silueta y escuché que me decían 'tenga'. Vi una mano que me daba un anillo. Le dije que no me quedaba y me contestó 'pues póngaselo en el dedo chiquito'. Como ya se me hacía tarde, me lo puse y ya no le dije nada. 

  • Foto: Claudio Gardea
  • Otro día, como a las 10 y media de la mañana vi a un señor, le vi su forma humana, pero su cara no. Me preguntó por el anillo, me dijo que no me lo fuera a quitar y cuando se lo mostré me pidió que hiciera una oración por él porque -me dijo- 'yo quedé en tierras extrañas'. Claro que le recé su Padre nuestro y su Ave María. Yo creo que por algo me lo pidió a mí", concluye.

    ¿Le entras o te da frío?

    En este tipo de visitas, tu guía será uno de estos personajes: José María Lafragua, un fraile franciscano, la dama del siglo XIX, Dolores Escalante, La Moira, La Plañidera y Lola Casanova.

    En ellas conocerás el panteón y sus personajes, pero también episodios de la historia de México contados de forma divertida. ¡No te vas a aburrir! Pero tal vez sí te asustes... 

  • Foto: Claudio Gardea
  • Su historia

    El Panteón de San Fernando se creó a un costado del Templo del mismo nombre para enterrar ahí a los frailes franciscanos que fallecían. Estuvo en operación de 1836 a 1871, en pleno tiempo de la Guerra de Reforma, por lo que muchos de los personajes de ese episodio de nuestra historia están enterrados ahí, siendo el más importante de ellos Benito Juárez García.

    En 1850 azotó a la ciudad una fuerte epidemia de cólera y la necesidad de contar con más espacios para a la inhumación hizo que se volviera cementerio general.

    En 1871 se clausuró junto con los panteones Santa Paula, San Diego y San Antonio de las Huertas porque estaban dentro del perímetro de la ciudad, aunque en 1872 abrió sus puertas para recibir los restos del célebre Benemérito de las Américas.

    Hoy, el Museo Panteón de San Fernando cuenta con 75 tumbas y alrededor de 800 nichos. Las que más busca la gente son la de Benito Juárez y la de José María Lafragua y Dolores Escalante. La historia de estos dos últimos personajes es fascinante, así es que cuando vayas pide que te expliquen de qué se trata. Tampoco olvides pedir que te cuenten leyendas de miedo. 

  • Foto: Claudio Gardea
  • Museo Panteón de San Fernando
    Plaza de San Fernando 17
    Col. Guerrero
    5518 4736
    Martes a domingo, 9 - 17 hrs.
    Entrada libre
    Metro Hidalgo 

    Visitas caracterizadas: sábados a la 1:30 pm y último viernes de cada mes en Noche de Museos, también son de entrada libre.

    Recorridos guiados sin caracterización: a cualquier hora dentro del horario del panteón, siempre y cuando se junten dos o más personas y se cuente con el guía en ese momento. De otra manera, si se trata de un grupo numeroso puedes hacer una cita por teléfono y se programa el recorrido.

    También lee:

    4 impresionantes beneficios del chocolate oscuro

    Joyas ocultas del Vive Latino 2016

    Fantasmas famosos de la CDMX

    Espantos japoneses clásicos

    Texto  
    ¿Te gusta?